Rodrigo Salinas y 31 Minutos
o bien:
Por Christiano y Carlos Reyes G.
Rodrigo Salinas es uno de los más conocidos dibujantes de la Nueva Gráfica Chilena y fue co-inspirador vital del proyecto artístico Kiltraza. Sus cómics: Rata Galdames, Morgan Shila, Carlitos Marx, El Reino del Sí, Arturo Prat Is Not Dead, son una clara muestra de sus obsesiones que flirtean con el humor absurdo, los Muppets, Hall & Oates, Hervi, el mago Oli, Oski, Mario Kreutzberger y Walt Disney. Su enorme talento creador y el de sus amigos, es el mismo que ahora nos contamina gratamente haciéndose notar en medio de la repugnante falta de creatividad de la televisión criolla.
Una lluviosa tarde, nos encaminamos a la casa de guatón para averiguar, de una vez por todas, cómo es que un gran dibujante de cómics underground se convirtió en uno de los titiriteros del más famoso programa infantil de la Televisión Chilena: 31 minutos.
Hace frío y llueve torrencialmente, pero afortunadamente Guatón es un gran anfitrión, nos espera con galletas y bebida en su confortable departamento del centro de Santiago que comparte con su esposa “Chum”.
En las paredes pueden verse varios originales de Salinas y una joya: un dibujo de Coré. Si miras con atención descubrirás que en varios rincones de la casa hay revistas, monos, calcomanías y hasta cortinas de ducha con motivos de dibujos animados. No es difícil imaginar a Salinas en el universo de Roger Rabbit. Si no sabes quién es Rodrigo Salinas, ni Kiltraza, y quieres hacerte una idea de su trabajo comiquero, puedes informarte leyendo dos artículos de nuestro sitio web en: http://www.ergocomics.cl/paginas/articulo.php?idele=19690709000026 y en: http://www.ergocomics.cl/paginas/articulo.php?idele=19690709000027
En cuanto apretamos play y Salinas habla, tememos que las 2 cintas de audio que hemos traído, bien puedan resultar pocas. Y es que Salinas habla rápidamente, tanto que a ratos da la sensación de que ni siquiera piensa lo que dice, lo lanza todo sin dramas y es que él es relajado y espontáneo. Además se sabe en confianza, nos unen largos años de amistad, autogestión y locuras comunes en el vilipendiado mundo del comic, así es que no hay ningún hielo que quebrar. Al poco de iniciar la conversa nos damos cuenta con horror que la labor de transcripción de la entrevista, será una tarea titánica. Lo que leerán a continuación es un apretado resumen de lo que se salvó de las tijeras de la edición.
La intención de la entrevista es clara para nosotros: Todos conocen a los creadores del programa: Peyrano y Díaz, pero no todo el público sabe que Matías Iglesis, Daniel Castro y Rodrigo Salinas, tres miembros fundadores de la Nueva Gráfica Chilena, son parte del staff de 31 minutos y piezas clave del éxito del programa y quisimos saber cómo es que habían llegado a formar parte del proyecto :
“Bueno, nosotros no teníamos muy claro a qué íbamos”- Nos cuenta Rodrigo- La primera reunión fue qué hacen ustedes y cómo y de repente estábamos dando una entrevista de trabajo, sin saberlo. Todo se puso serio cuando dijeron: Necesitamos tres personas, en estos tres cargos específicos, y así Matías quedó de director de arte y Daniel y yo pasamos a realización.
Ergocomics: ¿Cómo surgió la idea final del programa?
Rodrigo Salinas: Al principio había unos personajes que tenían nombre, pero no tenían visualidad. En el grupo había sólo tres personas capacitadas para crear esa estética. Pudo haber sido una estética peyrana, grotesca, así como chancho cero.(Comic con guiones y dibujos de Peyrano, publicado por El Mercurio) Pudo haber sido una estética mía, que habría sido como más gay (risas), Pero finalmente fue Matías quien inventó el logotipo y la estética de los monos y del programa. A él se lo debemos todo.
E: ¿Cómo definirías su estética?
RS: Como la de un noticiero de los '70. Tiene una estética antiguoide.
E: Háblanos de las voces... Se escuchan claramente las de Peyrano, Díaz, las de Daniel y la tuya. ¿Pero quién hace las voces femeninas?
RS: Al principio las hacíamos nosotros y nos quedaban como travestis (Risas) así que nos mandaron a todos a clases de voz al área de talentos del canal. Estábamos con las profesoras de Rojo.
E: Noooo...
RS: La dura, esa es la parte más cómica del asunto. Y fue tanto que al final la profesora renunció. Claro, enseñarnos voz era combatir la ideología del programa. Cuando haces títeres es como: “miren niños” (Lo dice con falsete de títere) Tienes tono de actor. Y ninguno de nosotros es actor. Bodoque habla como Álvaro (Díaz) y reacciona como Álvaro, los personajes son súper humanos.
E: Tiene ese dejo de una voz imperfecta y esa es la gracia.
RS: Eso es la raja. Pero fue tanto lo de la falta de voces femeninas que incluimos a la Alejandra. Ella llegó en un momento en que en el programa éramos sólo hombres, hacía falta.
CR: ¿Cómo es el sistema de trabajo de calcetín con rombosman? El personaje está supeditado a los derechos del niño. Y esa fue una de las varias razones por las que el proyecto del programa ganó un fondo concursable.
RS: Claro. Daniel actúa de Rombosman, y yo me he hecho cargo del personaje. Fue muy fácil hacerme cargo de Calcetín por que en el fondo era un superhéroe, para mí era la raja desarrollar un superhéroe. Ahora ya tengo una mecánica de trabajo con Calcetín, como el uso de la música y todos esos clichés del personaje que hacen fácil hacerlo. El único pie forzado es que tenemos que usar los derechos del niño. Todo lo que pasa es un excusa para contar un derecho.
Es un personaje que tengo súper claro para dónde va. Y más encima tengo la distancia por que el personaje lo actúa Daniel, entonces yo hago los otros personajes, los niñitos... Para mí ya era fácil trabajar con Daniel porque habíamos hecho juntos los cortos de “La Cordillera de los Andes” y ahora “El Túnel” que ya está por estrenarse. Como ustedes saben Álvaro y Peyrano se ganaron un Fondart para hacer la película de 31 minutos y nosotros vamos a telonearla con nuestros cortos.
E: ¿Sabes qué tipo de público ve el programa?
RS: Niños y adultos... La visión de Pedro (Peyrano) no es el de una visión paternalista de los niños y agradezco que sea así. Él dice: “Saca eso porque no la va a entender un niño” y uno dice, sí en realidad. Lo piensas dos veces.
El Magito, por ejemplo, es ese personaje que dice: “Es mi show, es mi show”, es muy bueno por que tiene un humor generacional y a la vez universal. Básicamente hablando, es la historia de un mago que trata de hacer unos shows chantas que no le resultan y después se mete dentro de una gueá y... El mago Oli.
E: El mago Oli es un referente muy recurrente en ti.
RS: Y la gracia es que el chiste lo entiende nuestra generación y también un niño, por que un mago chanta es chistoso en cualquier país.
E: Esa es la capacidad doble de hacer un chiste universal y apelar al mismo tiempo a un hecho muy coyuntural...
RS: Los que entienden lo del mago Oli se se pueden reír de más cosas. También hicimos ese capítulo de los marcianos, que llegaban y decían (Tararea la famosa melodía de Encuentros cercanos del Tercer Tipo) Eso es un claro referente a Spielberg.
E: En 31 minutos siempre han usado muchos referentes, como ese capítulo cuando terminan con la música del Chavo del Ocho, o con la canción de la oficina del Japening con Ja, o con la de Magnetoscopio Musical Es casi como reírse un poco de la idea de una televisión que ha sido siempre un medio muy auto referente.
RS: Claro y tenemos también una dupla de personajes que remiten al sapo Livingstone y a Carcuro.
E:¿Qué te gusta del proyecto de 31 minutos?
RS:: Que puedo hacer lo que quiero.
E: ¿Por qué 31 minutos es un programa tan exitoso? Es extraño si piensas que su humor no apela a la grosería, como es tan habitual en la televisión chilena. ¿Por qué crees que el programa gusta a niños y a personas de todas las edades?
RS: 31 minutos es un programa para niños. Pero nosotros no tratamos a los niños como niñitos. Ellos ven las noticias todos los días. Nosotros iniciamos el proyecto pensando en que los niños ven de todo. 31 minutos es un noticiero que no les habla en un lenguaje infantiloide. Si uno hace algo en que lo pasa bien, le va a gustar a mucha gente.
E: ¿Esa es la clave del éxito? ¿Tratar a los niños como adultos, como personas reales, posibles?
RS: Una vez, le pagaron a Peyrano para ir al canal13 a criticarlo. Era la época cuando estaban haciendo cambios en ese canal. Y Pedro destruyó al 13, cosa que no es muy difícil (risas), pero la gueá más chistosa que les dijo fue: “Miren, les voy a dar una idea revolucionaria: pásenlo bien haciendo tele”.
Esa es la clave. Tu vez al guatón Francisco en los 80's disfrutando la tele, ves el Jappening cuando era bueno y se nota que lo pasaban bien. Yo creo que la clave de este programa es que disfrutamos haciéndolo. Si fuera un programa serio yo creo que no lo pasaríamos tan bien.
E: Y te habrías bajado del proyecto hace rato.
RS: Claro. Los proyectos fomes no me gustan. Cuando escribes un guión y lo llevas para grabarlo, empiezas a pelusear y a improvisar. Y después cuando veí eso en la edición...
E:: El peluseo queda.
RS: Yo creo en el peluseo controlado, riguroso. por que también esto es rigor, es hacerlo bien, resulta. Al final igual es un trabajo. Quizás cuando tenemos que repetir y repetir, se vuelve monótono, pero el espíritu está ahí.
E: Cuando en Ergocomics vimos por primera vez el programa y supimos que era de títeres, cachamos que estabas en tu salsa, porque para ti los Muppets siempre fueron muy importantes. Y los chistes eran tan tuyos que era casi como si estuviésemos hablando contigo.
RS: Yo creo que el humor es una herramienta para transmitir cosas. Cuando uno primero se ríe y después dice: ¿De qué cresta me río?, es súper bueno. Pero sin tratar de pasarse de listo, es una tontera tratar de pasarse de listo con niños. A mí lo que más me gusta son las segundas lecturas, o cuando tu pensai que ya te reíste una vez y viene otra más, Eso lo encuentro la raja. Es como el chiste después del chiste.
E: Hablemos de las canciones. ¿John Quijada eres tú?.
RS: Yo canto esa canción y hago las dos voces. La del niñito y la del diente. Pero la letra es de Pedro con Daniel. El Kbzón (Músico de Chancho en Piedra) llegó con la pura música de las canciones y cada uno tenía que trabajar en la letra. Hay algunas que hicimos entre todos.
“Bailan sin César” la hice yo solo y coescribí otra con Álvaro, pero en las otras de alguna manera estoy involucrado... es colectivo. Por ejemplo Pedro escribió la letra de La-la. le llevó días, le dio vueltas (Risas) A veces se llamaba ñaña, papa, hasta que llegó a La-la, la esencia misma del programa. Esa canción me recuerda el minimalismo de Manolo (Dibujante y Miembro de la desaparecida Sonora Kiltraza)¿Te acordai de esas canciones de Manuel Rodríguez?. ¿Cuchuflí, ajedrez? Yo pensaba que no iba a cantar más, que ya estaba retirado de la música. Para mí eso ya era un tema superado.
E: Claro, después de Sonora Kiltraza.
RS: Sí,. Pero la vida siempre te da otra oportunidad. (Risas) Ahora es la raja entrar a un estudio y grabar. Después inventamos la canción final del disco (tararea la letra). “Yo nunca vi televisión por que es muy fome”
E: Ese es un muy buen comienzo para una canción y la música recuerda un poco a los años 60's.
RS: A esa canción le pusimos diferentes letras y después cada uno la cantaba. haciendo sus personaje como We are the world. Eso fue maravilloso.
Me gusta la letra y que estos personajes, que son de la televisión, se burlen de la televisión, pero vivan de ella. Es como el cinismo de la televisión, son miserables, igual que las gueás de la tele. (Risas). Es como si todos los famosos de la tele se juntaran cínicamente a cantar: “Niños no vean tele que hace mal”. Y nosotros como los creadores de esto, también somos cínicos.
E: Pero tú no vas a hacer una carrera de televisión como algunos de ellos, nos imaginamos que si sigues en la tele va a ser con otro tipo de trabajo.
RS: Es que para mí la tele es otro soporte más.
E: Esa es la diferencia. Para ellos es EL soporte.
RS: A Pedro (Peyrano) lo que más le gusta hacer es dibujar. Pero también nos gusta contar historias y también sentimos que podemos dar una opción en la tele. Pero yo creo que de verdad, ninguno de los que estamos en Aplaplac tenemos esa onda de estar en la tele a cualquier costo. No, de hecho estamos haciendo 31 minutos por que nos gusta y haremos una segunda temporada y si hacemos otra cosa, será algo que nos guste.
E: Y además es mucho más entretenido sublimar a través de muñecos que ser uno mismo quien está en pantalla.
RS: Es piola por que te saltai toda ese atado de los fans. Cuando uno hace un personaje de títere, es muy chistoso grabar cómo es que lo haces. Me han dicho que cuando hago Juanín (el coordinador de piso) se me deforma el rostro. Sufro haciéndolo, porque estoy actuando. Ubicarse espacialmente, es un cuento. No sé si somos los mejores titiriteros, pero sí que somos los más extremos. Nos tiramos en cualquier lado. Si han visto cómo se maneja un títere y si lo que ven es la raja, es por que hay alguien en lugares en donde nadie cabría. Ese hombre en nuestro caso, es generalmente Daniel. Tiene una gran habilidad. Es el hombre de goma.
E: ¿Es un aviso para las chicas.?
RS: Y... Daniel es el más guapo.
E: Y seguramente estará deseoso de conocer alguna chica tan moldeable como él (risas)
E: ¿Algún grupo de titiriteros los han criticado?
RS: No. Pero sobre eso, yo creo que una característica importante de Aplaplac y de la Nueva Gráfica Chilena es que somos barsas. O sea, no sabemos de cine y hacemos películas. No somos actores y actuamos. Yo creo que la gente tiene todo el derecho a desarrollarse en todo lo que quiera. Si lo hace bien o mal, bueno eso es otro tema. Tal vez en el pasado no hayamos sabido hacer lo que hacemos, pero hemos ido aprendiendo, Al comienzo los programas no eran tan buenos como los de ahora. Hay una evolución.
E: ¿Te fue difícil adaptarte a un sistema televisivo con tanta gente? Porque el trabajo del dibujante es más bien solitario.
RS: Lo que más me costó, fue levantarme temprano y cumplir con un rigor.
E: ¿Tu crees que conocer el lenguaje audiovisual afecte tu futuro trabajo de dibujo?
RS: Puede ser, no sé. Siento que ahora estoy narrando mucho mejor que en otros proyectos de cómic porque he tenido más espacio para contar historias y por que he aprendido más, puede ser... Pero también en el dibujo uno ordena mucho más fácilmente una página. En el programa hay muchos factores, uno escribe una historia, después hay que actuarla, después no queda el énfasis como uno quería, entonces de repente hay que cortar. Si hay algo que realmente me gusta es editar. Todo lo que sé de edición, lo aprendí con Rodrigo Toro, nuestro editor
E: En el segmento de Bodoque hay unos planos super jugados, mucho picado.
RS: Narra súper bien. Cuando habla como poéticamente es muy chanta. Yo sé que cuando Álvaro (Dïaz) hace ese personaje está queriendo decir otras cosas, quizás parodiando la forma de hacer los noticieros. Bodoque tiene mucho de investigador... te engrupe y hace reflexiones...
E: Entrando en la fantasía del programa, uno percibe que Bodoque, que es un tipo tremendamente talentoso, tiene algunos problemas con Tulio.
RS: Tulio cree que su mejor amigo es Bodoque y no es así. Bodoque quiere aserrucharle el piso, porque efectivamente tiene más capacidades que Tulio, sin embargo, Tulio como Coordinador Periodístico es más que él. El sueño de Tulio siempre ha sido dirigir el programa. Siente que puede hacerlo mucho mejor. Pero con todas sus miserias yo creo que ellos igual son amigos.
E: En Ergocomics nos preocupa que Calcetín con Rombosman acabe por sufrir el típico síndrome del súper héroe: querer hacerlo todo y no poder.
RS: De hecho, conoce el amor...
E: Se enamora de una calceta chilota (Risas). Pero hablemos de temas serios ¿Mario Hugo es cuico o sólo habla como un cuico?
RS: La otra vez en un foro en Internet leí que alguien escribió que todos nuestros personajes eran gays. O sea....Yo creo que todos los hombres son gays (risas) Partiendo de esa premisa, sí, puede ser que todos los personajes sean gays. Pero yo creo que todos tienen su pinche. También hay un gran porcentaje de personajes del programa que viven con la mamá. Tulio, por ejemplo todavía vive con su mamá. Y en el caso puntual de Mario Hugo, no sé si es cuico. Yo creo que habla así porque es como desganado. Mario Hugo vive con todos sus perros, tiene muchos perros, Chaucha, Cabeza de Chaya, Rusia, Yo no Soy, etc.
E: Guatón, hablemos del futuro de la Nueva Gráfica.
RS: La Nueva Gráfica Chilena, se fortaleció con 31 minutos. Nosotros siempre habíamos tenido un trabajo individual, pero, ahora con este trabajo, hemos aprendido a trabajar más en equipo.
Nuestro próximo proyecto en la Nueva Gráfica es César Gábler: El musical.
César va a tener un estreno en sociedad como el mejor nuevo cómico Chileno. Todos vamos a estar trabajando en su personaje.
Él tiene una rutina, nosotros la vamos a decorar, vamos a armar algo y lo vamos a tirar a los leones, con la certeza de que César ES el hombre, todos confiamos en él. La Nueva Gráfica está compuesta de puras vedettes y todos han tenido su momento de mostrar sus cosas y de apoyar a los demás. Ahora César va a tener el suyo. Tomás está preparando un proyecto fotografíco y yo tengo las intenciones de lanzar “La Isla del No” en una edición de La Calabaza del Diablo. Yo publico en La Calabaza “El Reino del Sí” y a cambio, ellos me editan “La Isla del No”.
La Nueva Gráfica todavía puede hacer lo más importante. Soy joven y tal vez en el futuro podamos hacer algo en conjunto con Aplaplac.
E: Lo que más parece gustar gusta en Chile es lo humorístico ¿Es que somos muy depresivos y necesitamos mucho reírnos, o es que simplemente somos muy buenos para la chacota?.
RS: No lo había pensado, pero para mí el humor es un arma, una manera de saltarte el intelecto. Es muy bueno que primero la gente se ría y después reflexione. Es como la canción ultraderecha de Los Prisioneros. Tal vez no sea tan buena, pero no te dai ni cuenta cuando hasta un gueón facho la termina cantando y ahí se cumple el objetivo. (Risas) Se cierra el círculo. Que la cante uno no tiene ninguna gracia, pero si eres facho y la cantas, te estás atacando a tí mismo y no te das ni cuenta.
E: ¿De qué te gusta reírte?
RS: Me gusta mucho reírme de los tipos musculosos con toda esa exacerbación del cuerpo. Los niños andan jugando con juguetes así, que parecen inofensivos y que resultan ser una visión súper imbécil de la persona.
A mí me gustaría que mis hijos (si los tuviera) vieran este programa.
En el último capítulo de Rombosman se habló del derecho a la vida. Un personaje discute con su hermano y quiere matarlo y Rombosman le dice no, no lo puedes matar y el personaje pregunta ¿y por qué no puedo hacerlo? ¿Es inmortal? .
No, por que todo niño tiene derecho a la vida...la clásica. ¡¡Pero puta en realidad, no podí matar a alguien!! Es súper fácil. Los derechos del niño son súper obvios. Nadie puede matar a alguien aunque piense distinto a ti, porque aunque lo odies, no tienes derecho a matarlo. Es tan obvio. Es como el derecho a la salud. ¿Cómo los niños no van a tener derecho a la salud? Yo creo que nuestros personajes son chistosos, son pesados, son traidores entre sí, pero no son malos, no son malvados. De repente veo programas infantiles que me parecen mucho más malvados, como por ejemplo Barney, el dinosaurio. Yo creo que 31 minutos en un programa que está hecho por gente irónica, media pesada, inclusive un poco cínica, pero somos gente buena.
E: ¿Qué programa infantil recuerdas tu con cariño, aparte de los bochincheros?
RS: Los Muppets. Cuando vi los programas de recuentos del siglo pasado, en que se mostraban las cosas más importantes de la humanidad, nadie paró ahí .Me encantan las fábulas del verde bosque, Marco, Remi, La Isla del Tesoro y Tom Sawyer, La Cafetera Voladora con Florcita Motuda. De hecho queríamos que la canción contra la tele fuera “Pobrecito Mortal”. Yo siento que 31 Minutos y sus canciones son herederas de esa época y de Florcita Motuda. Para todos nosotros él es un genio extraordinario. Florcita Motuda le canta al cosmos, los planetas, pero para hablar de cosas muy simples. Esas canciones son maravillosas. Yo creo que me marcó. Y los monitos, a mí me gusta mucho ver monitos.
E: ¿Y todavía ves?
RS: Ahora no tanto porque no tengo mucho tiempo. He caído en los vicios de la televisión. No tengo ningún drama con Mekano. Entiendo esa dinámica, sé cómo funciona. Cuando hago zapping me quedo viendo pechugas sin ningún drama. Pero encuentro muy bueno que existan otras cosas. Esa multinombrada palabra diversidad, por ahí va el cuento.
Me da la impresión que toda la televisión al final te sirve, yo creo que 31 minutos está nutrido hasta de la mala televisión.
E: ¿Quieres decir algo antes de que terminemos de una vez por todas?
RS: Sí. Quiero agradecer a mi mentor: El Lechuga. (Risas).
Transcrito en Talleres JL S. A.