A
principios de los 70, un grupo de muchachos de Guadalajara –México-
deciden formar un grupo de rock, al que ponen por nombre The Green Hat
Spies. A finales de década, la banda ya se llama Sombrero Verde y cuenta
con un repertorio propio en castellano. Llegan a grabar dos álbumes,
aunque el escaso éxito obliga a un replanteamiento a nivel general. En
1986, a raíz de diversos cambios en la formación, se produce la
mutación en Maná con un enfoque menos endurecido y más latino en el
sonido de la banda.
Los mexicanos debutan en 1987 con el
álbum Maná, que pese a obtener buenos resultados comerciales no acaba de
convencer al grupo. No obstante, Warner se percata de su potencial y edita
Falta Amor (1989), su segundo largo, que de forma paralela a la promoción
obtiene ventas espectaculares. Esto propicia que la grabación de su
próximo disco se lleve a cabo en Los Angeles con una producción más
adecuada. ¿Dónde jugarán los niños? (1992) se convierte en un hit en
España, mientras el video del single Vivir sin aire obtiene un premio MTV.
Durante la gira de presentación del álbum, se producen cambios en la
formación que no evitan el éxito de un tour plasmado en el doble En
directo, que se edita en 1994. Cuando los ángeles lloran aparece en
ambiente de multitudes, acompañado de una nueva gira internacional que
llega a muchos puntos de América –norte y sur- y Europa. Obtienen una
nominación en los Grammys, cosa que amplía su popularidad en los Estados
Unidos, aunque finalmente no se hacen con el galardón. En 1997, los
miembros de Maná se recluyen en su casa-estudio de Puerto Vallarta para
definir su próximo trabajo, que será finalizado en los Angeles. Sueños
líquidos (1997) vuelve a obtener la nominación en el mayor certamen
discográfico estadounidense, aunque la suerte tampoco les acompaña en
esta ocasión. No obstante, en 1999 consiguen finalmente la estatuilla al
mejor álbum latino de pop-rock alternativo, tras lo que se lleva a cabo
su concierto acústico para la televisión –MTV Unplugged (1999)-.
También durante este año, participan en el álbum Supernatural –Santana-,
para favorecer a una las recuperaciones comerciales más espectaculares
que se recuerdan.
En 2001 se edita Grandes Maná, un
recopilatorio pensado para el mercado europeo, mientras la banda prepara
el que será su próximo álbum.
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